Hoy en día es difícil concebir una empresa que no posea ordenadores y una conexión a Internet. Y no solo empresas, sino también a nivel particular como herramienta de ocio o trabajo. Las empresas basan gran parte de su actividad en datos almacenados en equipos informáticos o en datos e información que viaja por la red.
Por un lado será importante garantizar que la información almacenada no se pierda, se degrade o se altere de forma incorrecta (seguridad) y por otro, el garantizar que datos de carácter personal o privados por la actividad de la empresa sean accesibles por personas no autorizadas (privacidad).
Ofrecer protección frente a estos dos tipos de vulnerabilidad es de suma importancia, tanto para la actividad y funcionamiento de organismos y empresas como para individuos particulares.
¿Qué sientes cuándo se te estropea el disco duro de tu equipo y pierdes todas tus fotos de los últimos 5 años?, ¿y si alguien suplanta tu identidad y accede a tus datos bancarios? , ¿y si tu empresa rival accede a tus datos con los diseños de los últimos prototipos que aún no habéis lanzado?.